viernes, 29 de noviembre de 2013
IMPORTANTE :)
- Conocer sobre las áreas protegidas, tomar conciencia de su importancia y respetarlas.
- Participar activamente en campañas que buscan proteger nuestros recursos naturales.
- Indagar en las plataformas electorales de nuestros representantes antes de votar para saber si priorizan la conservación y el uso sustentable de nuestros recursos naturales.
- Hacer pedidos de acceso a la información pública sobre proyectos que puedan afectar territorios que están protegidos.
- Reclamar ante nuestros representantes el cumplimiento del artículo 41 de nuestra Constitución; todo tenemos derecho a un ambiente sano y equilibrado. Las autoridades tienen la obligación de hacerlo valer, y las áreas protegidas son una de las mejores herramientas para que se cumpla.
- Visitar un Parque Nacional o un Parque Provincial para conocer la importancia de los recursos que se están protegiendo y, a la vez, colaborar con el financiamiento del área.
- Si es un propietario de campo, sumar criterios ambientales en el manejo de su propiedad.
- Si vivís cerca de algún área, ya sea rural o urbana, que crees que tiene valores que necesitan ser protegidos, acércate a tu municipio y preguntá cómo puede declararla reserva natural. A nivel municipal el instrumento es la Ordenanza y a nivel Provincial, una ley. Indagá entre tus representantes locales (concejales o legisladores) para identificar quién puede ayudarte a formular un proyecto de declaración de área protegida.
- Asociarse a organizaciones, como Fundación Vida Silvestre Argentina, que trabajan para crear e implementar efectivamente áreas protegidas.
http://www.vidasilvestre.org.ar/
Áreas Protegidas, para saber un poco más....
¿Qué significa que un área está protegida?
Un área protegida es un área manejada con normas que garantizan la protección de los recursos naturales y culturales.
Si bien la mayor categoría es la de Parque Nacional, existen otras formas de conservación como: Monumento Natural, Reserva Natural Estricta, Reserva Educativa y Reserva Municipal, entre otras.
Existen áreas protegidas públicas marinas y terrestres. Y, también, áreas protegidas terrestres privadas. Esto se debe a que el 80% de nuestro territorio se encuentra en manos privadas. Por ello, resulta fundamental involucrar a los propietarios de tierras en la conservación de las riquezas naturales de nuestro país.
Existen áreas protegidas públicas marinas y terrestres. Y, también, áreas protegidas terrestres privadas. Esto se debe a que el 80% de nuestro territorio se encuentra en manos privadas. Por ello, resulta fundamental involucrar a los propietarios de tierras en la conservación de las riquezas naturales de nuestro país.
¿Cuál es el problema?
No hay suficientes áreas protegidas terrestres y marinas. Y, las que existen, no se encuentran bien implementadas (con guarda parques, presupuesto, plan de manejo, etc.).
A nivel mundial, el número de áreas protegidas aumentó considerablemente durante las últimas décadas; ahora constituyen el 12% de la superficie terrestre, el 5,9% de mares territoriales y sólo 0,5% de áreas marinas fuera de jurisdicciones nacionales. Sin embargo, en la Argentina el panorama es muy diferente.
Según las metas planteadas en la Convención de Diversidad Biológica, firmadas en 1992 por el gobierno argentino y ratificadas en 1994 por el Congreso Nacional mediante Ley 24.375, los países del mundo deberían alcanzar a proteger al menos un 17% de cada región natural terrestre y 10% de las marinas, y asegurar que la mayor parte de esas áreas protegidas se encuentren bien implementadas (con guarda parques, presupuesto, plan de manejo, etc.) para que cumplan efectivamente con su función.
En la Argentina, sólo el 7,7% de la superficie continental se encuentra protegida. A la vez, sólo un 20% de estas áreas protegidas se encuentra con un nivel aceptable de manejo, mientras que el Pastizal Pampeano apenas supera el 1%, el Chaco húmedo un 3,2% .
El Mar Argentino, por su parte, tiene un 4% de su superficie protegida.
Se estima que de las 45 áreas marino-costeras protegidas, el 80% no cuenta con recursos para cumplir sus objetivos básicos.
A su vez, el nivel de protección no es parejo en todas las ecorregiones del país. Por ejemplo, los Bosques Andino Patagónicos, cuentan con un 35% de la superficie protegida, mientras que el Pastizal Pampeano apenas tiene un 1% protegido, el Chaco húmedo un 3,2% y el Mar Argentino tiene un 4% de su superficie protegida.
Según las metas planteadas en la Convención de Diversidad Biológica, firmadas en 1992 por el gobierno argentino y ratificadas en 1994 por el Congreso Nacional mediante Ley 24.375, los países del mundo deberían alcanzar a proteger al menos un 17% de cada región natural terrestre y 10% de las marinas, y asegurar que la mayor parte de esas áreas protegidas se encuentren bien implementadas (con guarda parques, presupuesto, plan de manejo, etc.) para que cumplan efectivamente con su función.
En la Argentina, sólo el 7,7% de la superficie continental se encuentra protegida. A la vez, sólo un 20% de estas áreas protegidas se encuentra con un nivel aceptable de manejo, mientras que el Pastizal Pampeano apenas supera el 1%, el Chaco húmedo un 3,2% .
El Mar Argentino, por su parte, tiene un 4% de su superficie protegida.
Se estima que de las 45 áreas marino-costeras protegidas, el 80% no cuenta con recursos para cumplir sus objetivos básicos.
A su vez, el nivel de protección no es parejo en todas las ecorregiones del país. Por ejemplo, los Bosques Andino Patagónicos, cuentan con un 35% de la superficie protegida, mientras que el Pastizal Pampeano apenas tiene un 1% protegido, el Chaco húmedo un 3,2% y el Mar Argentino tiene un 4% de su superficie protegida.
jueves, 28 de noviembre de 2013
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